jueves, 28 de junio de 2012

Drenaje linfático manual

Llega el verano, y la temperatura elevada pueden hacernos retener más líquido, haciéndonos sentir menos ligereza o incrementar la sensación de pesadez o dolor en las piernas.


RECOMENDACIONES PARA ATENUAR LA RETENCIÓN DE LIQUIDOS:

La retención de líquido se manifiesta como una hinchazón de los tejidos blandos, debido a la acumulación de líquido especialmente en dichas zonas. La retención de líquido es uno de los factores ocultos del aumento de peso, y se evidencia más en el espejo que en la balanza. Su causa puede ser tanto por el estilo de vida (sedentarismo), como fluctuaciones hormonales (embarazo, menopausia, pre-menstruo), desequilibrio en la ingesta de líquidos o trastornos circulatorios.
No siempre los hábitos y estilo de vida que nos ayudan a lograr evitarlo. Sin embargo, sencillos hábitos pueden ayudar a sentirnos mejor.

  • El primer paso para reestablecer el equilibrio entre la ingesta y pérdida de agua es la HIDRATACIÓN DE NUESTRO CUERPO. Aplicar una crema hidratante a diario, mejorará el aspecto de la piel pero lo que realmente hidrata nuestros tejidos, incluyendo los más superficiales, es la ingesta de agua, ya que sólo así se evitará la seca y áspera. Beba suficiente agua, para evitar la retención de líquidos y mantener la hidratación.

  • Aplique una crema hidratante con movimientos circulares y hacia arriba, los pies hasta el muslo para activar la circulación. Recuerde realizar exfoliaciones con cierta frecuencia, de modo que puede eliminar las células muertas. Disfrute el momento del baño para realizar esta operación.

  • Después de un día de trabajo, no hay nada más activador para la circulación que una DUCHA DE CONTRASTE: Se debe iniciar siempre con agua caliente, aunque nos sea más apetecible la fría. Hacemos movimientos circulares desde el tobillo hasta el muslo. Volvemos a realizar la misma operación pero esta vez con agua fría. De esta forma podemos repetir varias veces, contrastando. Para terminar, al igual que al comienzo siempre con agua caliente.
  • Después, el descanso de sus piernas en un alto, a unos 15 cm. por encima de la línea del corazón durante 15 minutos.

  • Nunca tome baños muy largos y agua muy caliente. Este debe estar tibia, porque el agua caliente elimina los aceites naturales de la piel.

  • Evite la ropa muy ceñida, el cruce de piernas al estar sentada y pasar largo rato en pie, ya que ambas situaciones que impiden el retorno venoso.

  • Siga una dieta libre de cuidado de los azúcares y sal y frito. Abuso de ensaladas, fibra, frutas y verduras. Evita el tabaco, el alcohol y el café.

  • El mejor ejercicio para favorecer la circulación es la natación puesto que se trata de un ejercicio aeróbico de bajo impacto en el que además el agua realiza un efecto masaje. Caminar a paso ligero es otra opción para favorecer el retorno.

  • En problemas crónicos, y de manera preventiva un tratamiento de drenaje linfático manual en los momentos en que sentimos más acentuada la retención mejora la circulación y la tonicidad de la piel, evitando la celulitis. El drenaje linfático no actúa sobre la grasa, ninguna terapia manual lo hace. Sin embargo, elimina el líquido retenido en la zona, favoreciendo la circulación y evitando la formación de celulitis, que de otra forma conllevaría. Los cambios son notables, y cuando se interrumpe el tratamiento enseguida se siente la diferencia.
 
Además si has decidido comenzar una dieta para eliminar los excesos del invierno, el drenaje linfático puede ayudar a que esta dieta sea más efectiva. 

El drenaje linfático es una técnica especialmente indicada para problemas de retención de líquidos, frecuentes en abdomen, caderas y piernas. También para aquellas personas con frecuente “pesadez de piernas”, causada por una insuficiencia circulatoria. 

El drenaje linfático manual es una forma de masaje muy suave e indoloro para el paciente, que favorece el funcionamiento del sistema linfático. A través de maniobras manuales, el terapeuta drena o desplaza la linfa (que se ha quedado estancada) hacia los ganglios linfáticos superficiales para su evacuación normal.

Una de las aplicaciones fundamentales del drenaje linfático manual está en el campo de la medicina para el tratamiento de linfedemas, edemas traumáticos, edemas de embarazos o del síndrome premenstrual, fleboedemas o edemas post-cirugía.

Recuerda que el drenaje linfático manual debe ser realizado exclusivamente por un fisioterapeuta especializado para garantizar la eficacia del tratamiento, sus beneficios son:

·         Prevenir y tratar problemas circulatorios (insuficiencia venosa y linfática).
·         Reducir edemas localizados.
·         Tratar la pesadez de piernas, aliviando su dolor e hinchazón.
·         Mejorar el aspecto de la piel.
·  Eliminar la retención de líquido en piernas, caderas y abdomen,  previniendo así el desarrollo de celulitis que esta retención provoca.